Adiós

Paisaje,
vistas
miradas perdidas
sonrisas de quita y pon,
valores morales en función del mercado.

Carteles,
ofertas,
bares abiertos hasta el amanecer
y borracheras,
todo en función de qué día de la semana sea.

Joder, qué pena eso de vivir en un calendario.
Podríais vivir en la puta luna y no pasaría nada mientras fuera sábado.

Grupos, amigos,
''amigos''
y familia,
de la que se escoge y de la que no,
''las mejores cosas de la vida no son cosas''
mejor no comentar,
una elección no es más que simple programación.

Relojes,
tic-tac tic-tac tic-tac
la muerte creó el tiempo para hacer crecer las cosas que mataría
y a veces se percata de su error
y no da tregua.

La muerte es el final, menos mal.

Gente,
demasiada gente,
superpoblación traída de la inexistencia
a esta porquería,
esta tormenta de mierda.

Personas,
joder que débiles son,
prefieren tirar el poco dinero que tienen al cepillo de la iglesia
antes que comprar comida,
todo sea por ir con el creador,
todo sea por encontrar esa salida.

Mecheros,
gasolina y whisky.
Estamos esperando la señal del juicio final,
queremos, perdón, queréis estar más cerca de Dios.

Y sólo encontráis el silencio.

Baila el humo por el aire,
puedo escuchar sus pasos,
me viene a buscar,
estaba esperando(te).

En el escritorio recargaba una del nueve de punta hueca. Y en sus ojos apunto de morir, se veía agradecimiento, ver que al final tras todo el esfuerzo y la lucha sólo había que dejarse llevar. Y ese era el secreto de toda vida.

                                                                                                                Hans.