miércoles, 14 de septiembre de 2016

Diario de una resurrección

05-08-2016
05:43
Despierto en una habitación rodeado de espacio vacío, aire blanco y ojos negros. Noto el yugo de mi existencia cargado sobre mis hombros mientras me incorporo en la cama que no proporciona descanso, apoyando los brazos en mis rodillas medito cada mañana, intento calmar las alucinaciones y me preparo para pelear contra todos mis demonios un día más. En ese preciso instante miro el hueco que hay a mi lado y pienso en que todo esto sería más fácil contigo, pero tenemos que hacerlo nosotros solos tengo que hacerlo solo. Con esta soledad que nos alimenta todos los días en esos breves instantes en los que nada parece cambiar ni llevar a ningún sitio. Enciendo un cigarro asomado a la ventana abierta a todo, donde las posibilidades se reproducen y todas las puertas parecen entre abiertas sin necesidad de ventanas por las que escapar salir. Hoy sé que el día va a ser complicado, me duelen cicatrices innombrables y mis labios sellados quieren hablar, pero no puedo permitirle hablar, no puedo permitirme seguir siendo esclavo de sus palabras. Cuando me acabé el café llegó el primer momento de debilidad, esa arcada que me abre por dentro, ese punzón en la sien, ese pitido en los oídos, ese temblor en las manos, esa palpitación en el párpado, ese dolor sordo y envolvente. Pasear por la calle es un suplicio. El soportar esas miradas-cuchillo implacables directas al corazón de aquellos que no se acomodan a los semiplaceres de la vida insulsa y de los conformistas. Si algo he aprendido con los años es que lo contrario del valor en esta sociedad no es la cobardía, sino el conformismo.

19:11
Soy esclavo de todos los procesos de mi mente, de mis ideas formadas y razonadas, reticentes la influencia de las minorías que buscan conflicto, como yo. Quizá por eso nos encontremos, quizá por los conflictos que chocan nos convencemos la minorías multitudinarias de uno solo. Esa esclavitud es liberadora, en esa minoría encuentro la revolución.

15-08-2016
11:24
Algunas mañanas pienso que puedo estallar en supernova, que puedo empaparme en la multitud y no aportar nada a esta sociedad; que puede que no quede nada por lo que luchar y sólo deba dedicarme a mí mismo, hacer culto al egoísmo, tener por altar mi obligo y por utopía mi destino. Algunas mañanas en cambio pienso en el futuro por el que quiero luchar y el mismo merece la pena. Un futuro lejos de los convencionalismos, un futuro donde el dolor y la penuria sufrida una y otra vez a lo largo de nuestras vidas ha merecido la pena. En el que nuestras manos nunca están solas, en el que nuestras sonrisas no son erróneas y todos los lugares que habitamos y nos habitan generan buenos recuerdos. Pero hoy no.

14:32
Hoy soy un espectro de humo transparente sin forma que enrarece el ambiente pero que no se adapta a cualquier recipiente que lo contenga. Soy el humo de la droga peor vendida que te puedas llevar a los pulmones. Soy el vaho que no aspiras por las mañanas de frio con la esperanza de que la suerte esté contigo. Pero tampoco. Soy el monstruo opaco de tu mente que te impide pensar con claridad. Soy la antítesis de mi mismo, mi alter ego, mi enemigo. Soy un loco al que le da cuerda una pandemia llamada sociedad en la que yo no existo. Soy humo, cuando tú no estás aquí.

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27-08-2016
09:01
En mañanas de duermevela como esta me ahogo en un vaso de agua y recurro a la libreta marcada, mi pequeño libro oscuro de las catarsis emocionales, mi recipiente vacío de horror y cicatrices. Ahí me desangro a base de papel y lapicero, ahí grito lo que callo, ahí me desahogo de cualquier vaso de agua.

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12-09-2016
13:51
Mucho ha cambiado desde que comencé la rutina y el autocontrol, desde que empecé a lamerme las heridas para hacer de mi reino un poblado de cicatrices. En esas cicatrices siempre encuentro las mismas preguntas recurrentes que nunca logro responder. ¿Y si la muerte no es el final? ¿Somos testigos de algo en nuestra vida o esta nos pasa por encima? ¿Por qué Para qué pensamos?¿Se puede vivir sin dolor? ¿El miedo es el más poderoso aliado o el más feroz de los enemigos? ¿Existe el perdón o sólo encontramos refugio en la desmemoria?
Ahora vuelo en círculos atravesando esas nubes de preguntas incontestables pensando que me faltan vidas para responderlas, y el deseo de acabar con la presente iba muchas veces en aumento a medida que las palabras sempiternas salían de sus afilados colmillos...

[Para qué, para qué te esfuerzas, para qué luchas contra ti mismo, para qué rehuyes de lo que eres, para qué te quedas, para qué no bebes, para qué sonríes, para qué intentas ser bueno, para qué vas a olvidar, para qué buscar escapar del bucle. PARA QUÉ QUIERES VIVIR]

18:07
Desde hace ahora unos días duermo mejor, y apunto cada día como victoria contra mi mismo. Pienso demasiado y algunos días me abro a arcadas frente al espejo, pero me obedeces, y aunque ahora mismo no sepa decirme cómo lo estoy haciendo, seguiré resurgiendo.

00:28
Cada vez que consigo que me sonría lo único que pienso es que ya le he ganado a la vida, y así quiero que siga..


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