Vacío.

El tarro de las galletas que se acaba, la botella de agua vacía. El grifo que de repente deja de echar agua. La piscina a la que te tiras pero en la que no chapoteas. El diario cuyas paginas están en blanco. El hielo que no se derrite ni a las más altas tenperaturas. Los sentimientos que se escapan por todos los poros.

Se me apaga la vida, darte las gracias lo primero, segundo, decirte que te he esperado todos estos años donde te dije, sentado frente a la puerta esperando que algún día llamaras a ella. Ese día no ha llegado, y a mí me ha llegado la hora. Mientras eacribo estas líneas noto como me desvanezco y mi último aliento se acerca. Por último, que te he querido siempre, siempre te querré y ahora que este es mi último aliento, es para tí. Te quiero Sandy.

Siempre tuyo, Edward.