La historia se repite y no es noticia, siempre cíclica, hasta la fatiga.
Vivo sin aliento.
Ya no puedo más, estas alas no me dejan volar. Solo puedo llorar, gritar, vomitar, desvariar.
Estoy para encerrar.
Mis lágrimas no me dejan despegar, las piernas no responden, ya ni si quiera puedo caminar.
No puedo más.
Todo se desmorona, todo cae, los pilares se derrumban, los sueños se han quedado atrás.
Todo se va.
El destino ha desaparecido, mapa y brújula han perdido el objetivo.
Ya no hay objetivo.
Ha empezado la guerra fría, se acabó la paz.
Patán, jamás hallarás paz.
No hay paz.
Me he perdido sin si quiera haberme llegado a encontrar.
Nihilismo llama a mi puerta.
Me ha venido a buscar, me ha venido a abrazar.
Déjate llevar.
Sólo hazme un favor, ayúdame a escapar.
sábado, 16 de noviembre de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Ateo del perdón
No quiero pensar, los párpados cerrados transparentan miradas cuyos ojos diluvian sobre unas vestiduras ajadas que camuflan un delito ...
-
No quiero pensar, los párpados cerrados transparentan miradas cuyos ojos diluvian sobre unas vestiduras ajadas que camuflan un delito ...
-
El vaso de agua, ¿medio lleno o medio vacío? Un punto de vista que no variará con el tiempo ni la circunstancia. El que lo vea medio vacío ...
-
Hoy no puedo hablar de ti, puesto que no estoy contigo. Tampoco puedo hablar de mí -pues yo s...
No hay comentarios:
Publicar un comentario